Sala Suggia
Sala Suggia
Este recinto se considera el corazón o el alma de la Casa da Música.
Una de sus características más interesantes es que se trata de una sala de conciertos en la que se puede interpretar música con luz natural.
El nombre de este espacio es «Sala Suggia» en honor a la violonchelista Guilhermina Suggia, considerada por muchos la mejor violonchelista del mundo en las décadas de 1920 a 1940.
La acústica del auditorio principal está considerada como una de las mejores del mundo, pero no es casualidad, ya que todos los materiales del revestimiento se han elegido cuidadosamente.
Este auditorio se distingue por su sorprendente homogeneidad acústica que hace posible una óptima percepción acústica desde cualquier parte de la sala.
La sala tiene un formato de «shoe box». El término «shoe box» define una sala en forma de «caja de zapatos».
Las cuatro primeras filas de butacas pueden retirarse cuando sea necesario presentar una ópera o un espectáculo que ocupe todo el escenario.
Uno de los factores más importantes es que el sonido se distribuya uniformemente por toda la sala. Para ello, hay una protección acústica que consiste en una estructura colgante junto a las luces del escenario que no solo garantiza unas excelentes condiciones acústicas para los músicos, sino también una propagación armoniosa del sonido desde la primera hasta la última fila de la sala.
Por razones de acústica y estilo, se decidió colocar dos réplicas de órganos mecánicos independientes a cada lado del escenario.
Así pues, el órgano barroco es una copia de un órgano mexicano y el órgano romántico es otra copia de un órgano existente en Bilbao, España. Las butacas tienen una característica determinante y única. Su tejido imita la presencia del 70% del público, a diferencia de los 50% de público habitual.
Pisos 2 a 4
Capacidad: 1.238 plazas